Los tres Garrideb es una de las historias cortas del personaje Sherlock Holmes. Fue escrita por Sir Arthur Conan Doyle y publicada dentro de la colección El archivo de Sherlock Holmes.
Argumento[]
Era junio de 1902. Holmes recibió una carta de un tal Nathan Garrideb. Llega a Baker Street John Garrideb y cuenta su caso. Dice que en Kansas había un anciano llamado Alexander Hamilton Garrideb, que se había hecho rico comprando tierras. John conoció al anciano y este se emocionó al ver a otro hombre con su mismo apellido. Hamilton le encomendó que buscara a otros hombres con el apellido Garrideb. Tiempo después, Hamilton Garrideb murió y en su testamento dejó su fortuna dividida en tres partes, que deberían repartírsela entre tres hombres con apellido Garrideb. Serían cinco millones de dólares para cada hombre. Y ahora John quiere buscar a dos hombres con ese apellido. Ya ha encontrado a uno, llamado Nathan Garrideb, y quiere la ayuda de Holmes para hallar a otro.
Cuando John se va, Holmes le dice a Watson que ese tipo es un sinvergüenza mentiroso. Holmes sospecha que miente. Luego llama por teléfono al tal Nathan Garrideb para reunirse con él. Van a la casa de Nathan, era un viejo que nunca salía de su casa, y no estaba tan emocionado por heredar tierras en EEUU, sino que el tal John le compraría su parte por cinco millones de dólares y con eso ampliar su colección de artículos y tener un pequeño museo en su casa. Fue Nathan quien mandó una carta a Holmes para ayudar a buscar a otro Garrideb.
En ese momento llega John Garrideb que había conseguido el periódico de Birmingham donde se anunciaba un tal Howard Garrideb. John le dice a Nathan que vaya a esa ciudad y convenza a Howard sobre lo que le espera. Holmes le pide a Nathan que mañana por la tarde le deje examinar la colección de artículos curiosos que tiene en su casa. Nathan dice que, con todo gusto, la casera lo dejará entrar. Tiempo después, Holmes dice que cree que ese anuncio en el periódico es falso y lo puso el mismo John. Al siguiente día Watson despierta de dormir y Holmes dice que estuvo investigando en Scotland Yard y que John Garrideb es en realidad James Winter, apodado, Evans el Asesino. Se dice que Evans había asesinado a un tal Roger Prescott, un falsificador de Chicago. Holmes investigó en la agencia de alquileres y descubrió que en el departamento de Nathan Garrideb, antes, vivía un señor llamado Waldrom, que desapareció bruscamente. Por las descripciones físicas, Holmes cree que Prescott es Waldrom. Holmes y Watson van a la casa de Nathan para ver su colección. Una señora casera los dejó pasar y se quedaron solos. Holmes dice que esa cuestión de los Garridebs es una farsa, y Evans solo quería sacar a Nathan de su casa para buscar algo.
En un rato llegó Evans a la casa de Nathan y entró por la puerta. Holmes y Watson se escondieron, mientras Evans abría una trampilla oculta bajo la mesa y entró en ella. Holmes y Watson se acercaron, pero Evans oyó los pasos y vio a Holmes y Watson apuntándoles con sus pistolas. Evans solo se ríe y saca un arma y dispara dos veces. A Watson le rozó una bala en la pierna y Holmes atacó e inmovilizó a Evans. Holmes se asustó mucho por Watson, y Watson notó que aquel hombre frío que siempre había sido, mostraba cariño y preocupación por su amigo. En el hoyo había una máquina de falsificación, era de Prescott y sacaba billetes casi reales. Evans era el único que conocía el paradero de esa máquina y que deberían darle una medalla por eso. Aun así, Holmes hace llamar a la policía.
Al final, Nathan Garrideb quedó decepcionado por la farsa y tuvieron que internarlo en un sanatorio. A Evans lo felicitaron por haber encontrado esa maquina falsificadora, pero, aún así, fue a la cárcel.